jueves, 24 de noviembre de 2011

mis malas costumbres,

curiosa reacción me he visto implicado por poner a cargar el teléfono BlackBerry, obviamente me olvidé de él por un rato y lo tenía un poco apartado de mi mesa (pues el cable no es lo todo cómodo que puede ser para tenerlo en mano siempre),

en eso que pasan sus buenos minutos cuando veo que parpadea y por lo tanto debo tener algún que otro mensaje, no me preocupa mucho porque a estas horas de la tarde suele ser siempre mensajes de correo o alguna que otra publicidad perdida que se encapricha en meterse,

pero no, no fue así, era algo mas importante, era una clienta que curiosamente me pedía la versión exacta del programa que tiene instalado en su máquina servidor (lo cual aun me desconcierta mas el por que de esa pregunta), pero lo importante es que tenía después de esa pregunta una tira de expresiones, reclamos, exclamaciones, enojos, caritas animadas y algo mas, clamando por la pronta respuesta, ¡uau que pasa aqui! me dije yo,

si es que los tengo mal acostumbrados, ellos saben que casi siempre les suelo contestar lo mas pronto posible, aunque no sea siempre aportando el dato o detalle que necesitan, si les digo donde esta y como esta,

muchas veces tengo que mal escribir diciendo "toy manejsndo", o "voy manejansd", alusión a que estoy circulando en coche y manejando por calles que ni puedo escribir por teléfono y ni que se desesperen, y eso que por suerte vivo en una mini ciudad de ochenta mil habitantes, donde no hay ninguna calle en diagonal y siempre se puede circular a velocidad breve y sin prisas porque no hay donde mas correr,

así que por los comentarios en buenas respuestas y esas confianzas que saben siempre que estoy disponible para lo que se les ofrece, pero el susto de que tenia como diez minutos sin responder era ya casi el fin del mundo,

¿será?

Francesc

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